La Escuela Argentina de Negocios ha realizado un trabajo de investigación para saber sobre la actitud de las personas frente al ahorro en estos tiempos de reacomodamiento. La encuesta ha arrojado algunos datos interesantes.
La pérdida del poder adquisitivo, frente a la devaluación y la inflación, afectan no sólo el consumo sino principalmente la capacidad de ahorro, lo que hace que más de la mitad de los argentinos no ahorre, siendo el bajo ingreso el principal motivo. Por otro lado, con la apertura
para la compra de dólares, sorprende que no haya una mayor tendencia hacia esa divisa. Además, es importante tomarse el tiempo y trabajo para hacer un análisis personal del total exacto de ingresos y egresos. Luego, cancelar inmediatamente gastos evitables y lograr bajar gastos de servicios, como Internet, cable o celular. Frente a las altas tasas, evitar como sea pagos mínimo de tarjeta, incluso vendiendo por Internet algún elemento que no se use.
Si bien ahorrar quizás no sea la base de la fortuna, es la trinchera para tiempos difíciles.